Reutilización de residuos para la decoración del hogar: ¡Súmate a la economía circular!
Según WWF, España vierte al mar alrededor de 126 toneladas de plástico al día siendo el segundo país europeo que más plásticos vierte a los océanos por detrás de Turquía.
Aunque hace años que en Europa se promueve la cultura del reciclaje, cuando lanzamos el residuo al correspondiente contenedor, no contamos con la garantía de que éste acabe dentro del circuito de reciclaje. Y es que según afirman varias entidades ecologistas, aun nos queda mucho camino por recorrer para lograr una recogida, gestión y tratamiento de residuos realmente eficiente y circular.
El 80% de los españoles reciclan
En este caso, este problema medioambiental no tiene su origen en la propia ciudadanía. Y es que según datos de Ecoembes, 37 millones de ciudadanos cada día separan sus residuos para tratar de reducir su huella ecológica.
De hecho, en 2019 gracias a ellos se evitó la emisión de 1,67 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera – una cantidad similar a las emisiones de las centrales de carbón españolas durante dos meses-. Además, se ahorraron 1,5 toneladas de materias primas, 6,36 MWh de energía y 20,74 millones de metros cúbicos de agua.
Pese a todos estos logros y las mejoras que debemos llevar a cabo en materia de reciclaje, según los principios de la economía circular: “no hay mejor residuo que el no generado”. En este sentido, existen algunas formas de reutilizar algunos residuos como envases, cajas, muebles o botellas y así evitar el desperdicio.
1.Fabrica maceteros con botellas
Cualquier botella, garrafa de agua o bote de conserva es susceptible de reconvertirse en una maceta. Es una forma sencilla de alargar el ciclo de vida útil del producto y ahorrarnos dinero en la compra del producto.
Además, podemos pintarlas y combinarlas a nuestro gusto para que combinen con los colores de nuestro jardín o balcón.
2.Construye sofás o estanterías con palés
Los palés pueden servir para mucho más que para transportar mercancías. Puedes restaurarlos, barnizarlos y convertirlos en cómodos sofás o soportes para una mesa, estantería o somier.
También puedes cubrir viejos neumáticos con telas o pintarlos y convertirlos en pufs o en una cómoda cama para tu mascota.
3.Crea colchas, cortinas o fundas del sofá con ropa antigua
Los residuos textiles también suponen un grave problema de contaminación para el planeta. Según la Agencia de Protección Ambiental, cada año se incineran 12 millones de prendas. Sin duda, es un proceso que contribuye a disparar las emisiones de CO2.
Por este motivo, además de donar o vender la ropa que ya no utilizas, puedes usarla para crear fundas para tu sofá o colchas para tu cama. Utiliza el ingenio para combinar tejidos y colores y conseguirás resultados únicos.
4.Da un nuevo uso a tus viejas puertas y ventanas
Aprovecha toda tu creatividad y potencial y dales una segunda vida a muebles antiguos o puertas y ventanas. Aunque un objeto ya no sirva para su función principal, esto no significa que no pueda ser utilizado para otra cosa y, además, darle un toque único a nuestro hogar.
La reutilización es la pieza angular de la economía circular. No sólo nos ayuda a reducir el riesgo de que los residuos acaben abandonados en vertederos, sino que nos permite ahorrar en nuestra propia economía.
Además, gracias a la reutilización podemos reducir en gran medida nuestro consumo de plástico y con ello estar un paso más cerca del residuo cero.