Prepara la caldera del hogar de cara al invierno
El invierno está a solo unos meses de distancia en España, y a partir de noviembre el frío se intensificará. Para mantener tu hogar cómodo y cálido, los expertos de Saunier Duval te ofrecen siete sencillos pasos para preparar tu caldera de gas doméstica. Desde revisar los radiadores hasta mantener una temperatura constante que optimice el incremento de costes en los próximos meses.
Si la caldera ha estado apagada durante unos meses, asegúrese de que esté activada en modo invierno o calefacción, luego verifique la presión de la caldera. Este debe estar entre 1 y 1,5 bar, dato que se puede leer en el barómetro integrado en la caldera, pero si es inferior se debe abrir la válvula de llenado hasta alcanzar el valor óptimo. Una vez realizada esta inspección, se comprueba que los radiadores están en buen estado y que no existen indicios de goteos o fugas en el circuito con libre circulación de agua. Además, a veces es útil purgar los radiadores.
En verano, a menudo sucede que se acumula aire en el circuito, lo que dificulta significativamente el calentamiento de los radiadores. Con el calentador encendido y un destornillador adecuado, desenrosque el tornillo de purga de aire y coloque también un recipiente debajo del orificio. Cuando sale un chorro constante de agua, el radiador está completamente ventilado y es hora de volver a apretar el tornillo para detener el flujo de agua. Por otro lado, la compra de un termostato en la vivienda, que permita el encendido y apagado automático de la caldera, es ventajoso en estos casos.
Los pasos incluyen verificar el sistema de instalación
Aprenda a realizar la inspección manual o digital de su caldera en un minuto con la ayuda de expertos en calefacción experimentados en la reparación e instalación de calderas o radiadores.
- La caldera debe estar en posición invierno/calefacción
- Encender el termostato y recuerda que la temperatura que elijas debe ser superior a la de la habitación para que funcione la calefacción.
- Mantener una temperatura constante
Es conveniente tener la calefacción entre 18 y 21ºC durante el día.
- Comprobar que los radiadores estén abiertos y que no haya fugas en el circuito del radiador
Con una simple inspección visual, puede detectar manchas y goteos debido a desajustes, espacios o sellos defectuosos que son una clara señal de posibles fugas.
- Drenar los radiadores
Esta sencilla operación consiste en expulsar todo el aire que se encuentra en las distintas zonas del circuito del radiador que pudiera dificultar el calentamiento. Calefactor encendido y presión del circuito correcta, comprobar todos los elementos calefactores uno tras otro aflojando el tornillo de purga hasta que salga un chorro de agua o ambos. Un chorro de agua continua indica la ausencia de aire en cada radiador y el correspondiente tiempo de cierre del respiradero. La pérdida de aire y parte del agua del circuito puede haber provocado una caída de presión. Por lo tanto, observe el manómetro y repita el llenado si la presión es demasiado baja.
- Comprobar la presión
Antes de poner en marcha la caldera, comprobar que la presión esté en torno a 1 bar. Si la presión es baja, llenar el circuito con agua utilizando el grifo de llenado de la caldera hasta alcanzar la presión especificada en el manual.
A una presión superior a 1 bar, reduce la carga de agua a través del grifo de desagüe o simplemente enjuagando un radiador. Ponga la caldera en modo invierno y opere el termostato para solicitar una temperatura más alta, la caldera se encenderá y después de 10 o 15 minutos los radiadores comenzarán a calentar.
Con la calefacción en marcha, comprobar en el manómetro de la caldera la presión del agua de la instalación entre 1 y 2 bar.
Si la presión es mayor, con el sistema frío, proceder como antes y reducir la cantidad de agua en el circuito