Cómo elegir la mampara de la ducha o bañera
La instalación de una mampara en el cuarto de baño supone una decisión relevante que se debe atender a una serie de necesidades que presenta la vivienda en cuestión. Ya sea para una ducha como para la bañera, el material y el diseño van a variar en función de las necesidades que se presenten y exija la reforma que se está llevando a cabo.
Una mampara supone una pantalla gigante que contribuye a mantener el baño higiénico y limpio, ya que no deja que las gotas de agua salpiquen más allá del interior de la ducha o bañera. Se trata de una solución que protege, en este sentido, el exterior y evita los posibles problemas, como las caídas o resbalones al salir. Por esta razón, es importante seleccionar la mejor opción para el cuarto.
Cómo escoger una mampara para el baño
A la hora de escoger la mejor mampara, existe una serie de factores que se deben tener en cuenta. La primera, y la más importante, corresponde al plato de ducha o bañera determinado: dónde se va a instalar y el diseño que presenta. El tipo de apertura va a influir de manera directa en la elección.
Por otro lado, el espacio del cuarto también supone otro aspecto a valorar. Si se trata de un baño pequeño, puede que una mampara corredera o plegable sea la mejor opción, de tal manera que el usuario puede optimizar así el espacio de la habitación en cuestión.
En cuanto al diseño y el color, el mercado dispone de una variedad que comprende desde cristales antihumectantes, mamparas transparentes o serigrafiados para aportar una mayor intimidad.
Ventajas de una mampara
Una mampara comporta una serie de consideraciones positivas como:
- Evita que el agua salga fuera de los límites de la mampara, de este modo se evitan tanto posibles inundaciones o salpicaduras. A causa de esta solución, el usuario tiene menos riesgo de caer o resbalar al salir de la bañera o de la ducha.
- Atrapa el calor dentro de la ducha para conservar así su temperatura.
- Produce una sensación de amplitud, ya que sus diseños de cristal provocan un efecto visual de mucha capacidad, sobre todo, en los baños pequeños.
- No se rompen con facilidad, ya que se fabrican con cristal templado.
- La cantidad de diseños y modelos que existen se adaptan a todo tipo de baños, de tal manera que se pueda decorar el cuarto a gusto del consumidor.
Tipos de aperturas para la mampara
La distribución del baño supone un aspecto relevante a la hora de escoger un modelo determinado:
- Mamparas con puerta batiente: se trata de un modelo recomendado para los baños de gran dimensión, ya que se abre hacia fuera. Entonces, en los cuartos pequeños puede suponer un problema, al limitar el espacio.
- Mamparas de puerta plegable: este tipo de apertura se cierra sobre sí misma para ocupar el mínimo espacio posible.
- Mamparas con puertas correderas: supone un modelo que, al igual que el anterior supuesto, reduce el espacio del cuarto de baño. Se desliza sobre carriles para abrir y cerrar. El 90% de las mamparas se instalan bajo este modelo, es decir, es el más demandado en el sector al no precisar un ángulo de apertura.
- Mampara fija: este tipo de mampara no se mueve, es fija. Por lo tanto, no tiene puerta. Queda instalada en la pared más próxima al plato de ducha o bañera, de tal manera que proteja de salpicaduras todo lo que pueda haber en su alrededor. Se suele combinar con una puerta corredera o abatible para cubrir todo el espacio.