Diferencias entre comprar una vivienda nueva para vivir o para invertir
La diferencia principal entre comprar una vivienda nueva para vivir o para invertir nuestros ahorros se basa fundamentalmente en el objetivo de la persona interesada en dicha adquisición. Así pues, no es lo mismo comprar una vivienda para hacer nuestra vida en ella, que comprarla para sacar un beneficio económico.
Según un estudio de Fotocasa, durante el 2019 en España la compra de viviendas con el objetivo de invertir fue de tan solo un 10%. Un porcentaje muy similar obtuvieron también las segundas residencias. A diferencia de esta cifra se encuentra el porcentaje de compra de primeras residencias que se situó en el 78%.
Reflejado por un análisis llevado a cabo por Expansión, “a nivel nacional, la rentabilidad combinada (aquella que suma el retorno de los ingresos por las rentas del alquiler con la revalorización de la vivienda) alcanza el 7,7%, según los datos de urbanDataAnalytics (uDA), empresa de Big Data dedicada al análisis de datos del sector inmobiliario”.
La crisis por Coronavirus ha afectado a multitud de sectores, y el sector inmobiliario no ha sido ninguna excepción. Por esta razón, ha surgido una nueva tendencia entre los compradores e inversores: la compra de terrenos. La adquisición de un terreno para construir una casa sobre plano es muy llamativa tanto para inversores como para cualquier otra persona. No obstante, debemos tener cierta precaución y conocer qué tener en cuenta cuando compremos un terreno para construir nuestra casa.
Además de un objetivo claro, existen muchas más diferencias entre comprar una vivienda nueva para vivir o para invertir:
Comprar una vivienda nueva para vivir
El perfil que está interesado en comprar una vivienda de obra nueva con el fin de vivir en ella es de una persona entre los 35 y los 45 años, parejas o familias jóvenes con niños pequeños y con un presupuesto que ronda los 300.000€.
La decisión de comprar una vivienda nueva suele llevarse a cabo por muchas razones como:
- Mejorar la calidad de vida comprando una casa más grande, luminosa, con trastero y garaje, etc.
- Tener mejores comunicaciones con centros comerciales cerca, colegios, parques infantiles, etc.
- Mayor comodidad y zonas comunes que tengan piscina, zonas verdes, gimnasio, pista de pádel, etc.
Este tipo de compra suele hacerse con vistas a un futuro, por lo que se buscan con más habitaciones de las que se necesitan en el momento de compra. Puesto que esta inversión suele ser para un periodo de tiempo muy largo o incluso para toda la vida, el proceso de compra es más lento y está muy estudiado antes de realizarse.
Pese a que el inmobiliario se ha visto afectado por la pandemia por Coronavirus, Portal sigue ofreciendo un amplio abanico de promociones de casas de obra nueva a estrenar en cualquier parte de España para que puedas elegir la que más te guste.
Comprar una vivienda nueva para invertir
Dentro de la opción de comprar una vivienda nueva para invertir, según un estudio de Casaktua un 33% de los compradores prefieren realizar esta inversión para alquilarla mientras que solo un 12% piensa en revenderla.
En este caso, el perfil de la persona que suele comprar una casa como inversión es de 45 años, tiene un empleo estable y un nivel adquisitivo elevado. El presupuesto medio que manejan es significativamente inferior al perfil anterior, siendo de 125.000€ aproximadamente.
Aun con la situación de la pandemia por Coronavirus, el alquiler de casas nuevas es mucho más elevado que el alquiler de las casas de segunda mano. En el caso de que el inmueble se destine a este propósito, los expertos recomiendan que sean pisos pequeños pero que estén en una zona con alta demanda de alquiler.
Por otro lado, si la vivienda se quiere revender existen dos opciones:
- Revender a un inversor: es mejor opción un piso pequeño para que al inversor tampoco le cuente venderlo.
- Revender a otra persona: en este caso es mejor hacernos de un piso más grande. Tres habitaciones es el número perfecto para este fin.