Guía para comprar el mejor televisor Smart TV en calidad precio

Mientras los fabricantes compiten por crear el mejor televisor Smart TV del mundo, los aficionados al contenido multimedia estamos de enhorabuena.

Dado que la inversión en el desarrollo de pantallas es cada vez mayor, el número de prestaciones aumenta y los costes de fabricación disminuyen. Es decir, cada vez es más sencillo y económico adquirir una buena televisión inteligente.

Y es que, las Smart TV han llegado para quedarse por mucho tiempo, ya que son dispositivos sumamente prácticos que te permiten conectarte a internet y disfrutar de tu contenido favorito en línea. Cuentan además con decenas de aplicaciones en streaming, e incluso algunos televisores inteligentes ya permiten descargar y jugar videojuegos.

Sin embargo, tomar la decisión de compra en torno a una pantalla no siempre es tarea sencilla, especialmente cuando observamos las diferencias de precio que existen entre los modelos más baratos y los de gama alta. Por ello, en esta guía encontrarás todo lo que necesitas saber para elegir la mejor Smart TV en calidad precio del mercado.

¿Qué debes saber antes de comprar una Smart TV?

OLED, 4K, 8K, Hz, Android TV, HDMI, Wifi, LAN y muchas otras características entran en juego a la hora de comprar un televisor Smart TV. Es posible que te preguntes qué significa cada una de ellas y cuáles te ofrecen mejor calidad de imagen sin tener que invertir tanto dinero.

Lo primero que debes hacer es no dejarte impresionar por las imágenes que ves en internet. Lamentablemente, mucha gente adquiere un televisor inteligente pensando que su calidad de imagen es la misma que aparece en la publicidad, pero terminan decepcionados.

Es por ello que, a continuación, verás los criterios que realmente son decisivos y que determinan la calidad de tu nueva Smart TV:

Resolución

El estándar mínimo para una Smart Tv en la actualidad es 4K, y la mayoría de modelos de gama media, e incluso de gama baja, tienen esta resolución. La resolución se refiere a la cantidad de píxeles que es capaz de mostrar el televisor en pantalla. Entonces, cuanta más alta sea, mayor definición tendrá el panel y podrás apreciar mucho mejor los detalles.

Recientemente han empezado a tener presencia las Smart TV 8K, aunque su precio todavía es muy elevado para lo que consideramos una “buena relación calidad precio”. Por el otro extremo están los televisores HD, que están comenzando a quedarse obsoletos.

Lo mínimo a lo que puedes aspirar es 1080p o Full HD, eso si no eres muy exigente, pero la mejor opción hoy en día es comprar un televisor 4K.

Tamaño

El tamaño es una elección personal, que además se relaciona con el espacio que tengas disponible en casa. Aun así, debes recordar que las dimensiones tienen un fuerte vínculo con la resolución. Cuanto más grande sea el televisor, mayor debe ser su resolución, porque de lo contrario perderá nitidez.

Por ejemplo, una pantalla de 75 pulgadas a 1080p se puede convertir en un gran dolor de cabeza, pero se vería de perlas a 2160p (4K). Entonces, antes de comprar el televisor más grande que veas, asegúrate de que posean una buena cantidad de píxeles. Igualmente, si buscas una tv pequeña, por ejemplo de 27 a 32 pulgadas, tampoco es necesario que sea 4K.

Tipo de panel

El panel más económico de todo es el LCD, el cual te ofrece colores vivos y bastante brillo, pero a cambio de un mayor consumo energético. La opción más eficiente y extendida hoy en día es la tecnología LED, con menos saturación de las tonalidades, pero que igualmente te aporta colores exquisitos y un muy buen nivel de contraste.

Sin embargo, si quieres dar un salto en calidad, la tecnología OLED es la que gana en intensidad y fidelidad a la hora de reproducir los colores. Sus tonos oscuros son impactantes, se ven bien desde cualquier lugar y el precio no es excesivamente caro. El inconveniente es que su vida útil es un poco más reducida.

Sistema operativo

El sistema operativo está estrechamente ligado con la marca del televisor. Android TV es la plataforma más popular, aparte de ser la que cuenta con un mayor catálogo de aplicaciones. A pesar de ello, los fabricantes más importantes de televisores inteligentes han decidido desarrollar su propio sistema operativo.

Por ejemplo, Samsung ha creado Tizen, una plataforma con una interfaz sencilla, muy intuitiva y agradable, aunque con menos programas para descargar. Lo mismo ocurre con WebOs, de LG, bastante ligero y rápido, pero más limitado en su catálogo.

Si tienes la posibilidad, compra una pantalla con Android TV, sobre todo si eres de a los que les gusta probar y probar aplicaciones. De todos modos, el resto de sistemas operativos también te será de utilidad, y no te preocupes, que igualmente encontrarás Netflix, HBO, Amazon y Disney Plus en todos ellos.

Configuración de sonido

No es un secreto que el sonido es el punto más deficiente en la gran mayoría de televisores. En vista de que cada vez son más delgados, no hay la suficiente estructura física para albergar altavoces de calidad. Por consiguiente, es probable que debas comprar un subwoofer para mejorar la calidad del audio.

Solamente los televisores de gama alta disponen de un sistema de sonido efectivo por sí solo. Aun así, estamos hablando de calidad/precio, entonces tendrás que conformarte con los 8W o 10W que te ofrecen los altavoces estéreo de las Smart Tv más habituales.

Conexiones y HDMI

No es un apartado en el que tengas que profundizar mucho, porque todos los televisores disponen de wi-fi, que será la conexión más usada. Claro está, puede que te interese que tenga bluetooth, LAN, salida de audio, entre otras conexiones que te serán de utilidad.

También debes prestar atención al número de entradas HDMI para conectar más dispositivos. Imagina que quieres usar el ordenador o un par de consolas de videojuegos que usan esta interfaz. 

Para no tener que estar conectando y desconectando los aparatos, asegúrate de que el televisor disponga de por lo menos 2 o 3 HDMI.

Precio de la Smart TV

Lo que se considera caro o barato es muy relativo, porque todo depende de lo que tú creas económico o costoso, al igual que el presupuesto que tengas destinado a gastar en un televisor inteligente.

Sea como sea, los modelos más sencillos cuestan alrededor de 300 y 400 euros, mientras que la gama media oscila entre los 600 y 700 euros. Y si deseas ir más allá y comprar un televisor de primera categoría, ve pensando en gastar más de 1000 euros.

Por supuesto, en cada categoría encontrarás televisores calidad-precio en función de sus características, el coste económico y lo que tú desees invertir.