Los gastos de comunidad en un piso de alquiler, ¿quién los paga?
La cuestión sobre quién debe asumir la responsabilidad de pagar los gastos de la comunidad en un piso de alquiler es una pregunta que a menudo genera cierta confusión tanto para los propietarios como para los inquilinos.
Con el fin de comprender adecuadamente esta dinámica, desde K&N Elite hemos preparado un artículo para saber más a fondo sobre este tema. ¡Continúa leyendo conocer toda la información!
¿Qué son los gastos de comunidad de una vivienda?
Los gastos de comunidad hacen referencia a los gastos derivados del mantenimiento de una comunidad de propietarios. De modo que, agrupan los desembolsos necesarios para mantener y gestionar una propiedad de este estilo.
Por lo general, estos gastos pueden incluir diversidad de servicios, como el mantenimiento de áreas comunes, la limpieza, la reparación de ascensores, la seguridad, el seguro del edificio, etc. En definitiva, engloba los servicios que benefician a todos los residentes en la comunidad.
¿Quién paga los gastos de la comunidad?: inquilino o propietario
Depende de varios factores como el contrato de arrendamiento y las regulaciones. Normalmente, estos gastos recaen en el propietario del inmueble, y, por tanto, en el arrendador.
Esto es porque los gastos están relacionados con el mantenimiento y la administración del edificio en su conjunto.
Sin embargo, en algunas ocasiones, es posible que el contrato de arrendamiento especifique que es el inquilino el responsable de pagar los gastos de la comunidad. Como resultado, en cualquiera de los casos, es recomendable leer detenidamente el contrato de arrendamiento antes de firmarlo y aclarar cualquier duda con el propietario de la vivienda.
Gastos del inmueble que no forman parte de la comunidad
Es importante destacar que no todos los gastos relacionados con la propiedad se incluyen dentro de la comunidad. Algunos costos quedan fuera y son bien responsabilidad del inquilino, bien del propietario del inmueble. Estos son algunos de ellos:
- Servicios públicos (agua, electricidad, gas…)
- Impuestos sobre la propiedad.
- Reparaciones internas dentro de la vivienda.
Estos son algunos de los gastos que quedan fuera de la comunidad. Deben especificarse, además, en el contrato de arrendamiento de forma clara para saber quién es el responsable de cada uno de ellos.
¿Qué ocurre si los gastos de comunidad aumentan durante el periodo de alquiler?
Si esto sucede, la mejor forma de abordar este aumento depende del contrato firmado entre ambas partes. Aquí hay algunas opciones:
- Contrato de arrendamiento con cláusula fija. Si el contrato incluye una cláusula, especifica que establece una cantidad concreta para los gastos de comunidad durante la duración del contrario, en ese caso, el inquilino no está obligado a pagar el aumento.
- Contrato de arrendamiento con disposiciones sobre ajustes de gastos. En este supuesto, el contrato incluye la posibilidad de ajustar los gastos de comunidad. Si esto está así establecido, entonces el inquilino deberá responsabilizarse de pagar los gastos adicionales.
- Negociación con el propietario. También es posible realizar una negociación entre el propietario y el inquilino para llegar a un acuerdo.