Baterías solares
Si tienes una instalación fotovoltaica es porque ya has sido consciente de las grandes ventajas de este tipo de instalaciones, sobre todo para tu bolsillo.
Dentro de una instalación de autoconsumo hay un elemento clave al que mucha gente no le da la importancia que se merece, Hablamos de las baterías solares.
¿Qué es una batería solar?
Como sabes, aunque los paneles solares son el elemento principal de los sistemas fotovoltaicos, no son solo estas funciones las que pueden realizar funciones interesantes para proporcionarte la mejor energía solar.
Las baterías solares son ese dispositivo que nos permite almacenar la energía que producen las placas solares cuando hay radiación solar con el fin de que podamos usarla en los momentos en los que no lo hay, como la noche o los días nublados.
Este dispositivo también nos permite hacer uso de una intensidad de corriente mayor que la que están proporcionando las placas solares en funcionamiento, algo especialmente interesante a la hora de usar diferentes aparatos a la vez.
Funcionamiento de una batería solar
Las baterías solares se encargan de acumular energía eléctrica y proporcionarla cuando los paneles solares no están produciendo electricidad o bien no producen la cantidad necesaria.
En el momento en el que las placas solares producen una cantidad de energía mayor a la que se consume, esta se utiliza para cargar las baterías.
Una vez se necesita de la energía, la batería la devuelve al sistema.
Tipos de baterías solares
Podemos distinguir diferentes tipos de baterías. No todas poseen las mismas características por lo que, dependiendo de tus necesidades y preferencias, a ti instalación le irá mejor una u otra. Según el ciclo, distinguimos dos tipos de baterías:
- Baterías de ciclo bajo: Cuando la demanda es alta, son responsables del suministro de energía. Por tanto, siempre hay suministro sin ningún tipo de interrupción. Si utiliza dichas baterías, se recomienda no descargarlas en exceso, ya que pueden desgastarse y deteriorarse, especialmente cuando descienden por debajo del 20%. Debido a esta última característica, generalmente no es el tipo de celda preferido para los sistemas solares fotovoltaicos.
- Baterías de ciclo profundo: A diferencia de las baterías anteriores, estas baterías se pueden descargar repetidamente hasta en un 80%. Suelen ser muy utilizados, principalmente por esta característica, porque permiten disfrutarlos sin preocuparte por el desgaste, por lo que suelen ser la opción más necesaria para los sistemas solares.
Por supuesto, no todos los tipos de baterías se clasifican según el ciclo. Teniendo en cuenta la tecnología de fabricación y el electrolito utilizado, podemos distinguir tres tipos de baterías:
- Baterías de ácido-plomo: Estos son los más habituales en las instalaciones solares. Son muy eficientes, oscilan entre el 85% y el 95% y tienen una buena relación calidad-precio. Si está utilizando este tipo de batería, asegúrese de recordar cargarla completamente después de cada ciclo para evitar un mal funcionamiento y permitir que se descargue por completo durante unos días, ya que es posible que no se puedan volver a utilizar.
- Baterías líquidas: En este caso, estamos hablando de baterías abiertas selladas. La válvula sellada tiene una válvula que puede intercambiar líquido y la válvula abierta tiene una tapa que puede intercambiar agua. Sus precios son asequibles y son bastante resistentes a las sobrecargas. Por supuesto, su vida útil no es muy larga, y cuando trabajan a temperaturas muy bajas se descomponen.
- Baterías Absortion Glass Mat (AGM): la mayoría de estas baterías, en las que el ácido se fija en las fibras de vidrio para absorberlas, son de válvula regulada. Son las más modernas y caras de las que te presentamos en esta clasificación y tienen una vida útil larga, así como una gran resistencia a las temperaturas bajas. Se trata de baterías de ciclo profundo que apenas se autodescargan.