Cómo elegir el mejor cerramiento para tu jardín
En España, el propietario de un terreno, edificado o no, tiene derecho a encerrarlo, aunque primero debe solicitar un permiso municipal.
Para respetar las normas establecidas por tu ayuntamiento (como la altura máxima autorizada, la elección del color, etc.), es importante que conozcas la ordenanza municipal.
El propietario de una valla que no cumpla con estas ordenanzas corre el riesgo de ser sancionado y tener que rectificar el cerramiento para adecuarlo a la normativa vigente.
Diez criterios para elegir el vallado adecuado
Hay muchos tipos diferentes de vallas, cada una con sus ventajas y desventajas. A menos que sepa exactamente lo que quiere, le recomendamos que revise los siguientes 10 puntos
- La normativa. Antes de ponerte manos a la obra, dirígete al ayuntamiento y consulta con el departamento de urbanismo.
- El material. Elígelo según tu gusto, pero ten en cuenta si necesitará mantenimiento o no.
- El tipo. Rígido o flexible. Una valla flexible se adapta mejor y más fácilmente al relieve del suelo.
- La altura. Consulta el reglamento de tu ayuntamiento antes de tomar una decisión.
- Las condiciones de instalación y las herramientas necesarias. Dependiendo del tipo de cerca, es posible que deba colocar postes o comprar una grapadora para cercas.
- Vida útil. Depende del material y del mantenimiento. Piense en su compra como una inversión a largo plazo.
- Utilizar. ¿Es una valla para delimitar mucho o una valla para preservar la privacidad?
- La longitud de la instalación. Parece obvio, ¡pero no es lo mismo encerrar 20 metros lineales que 90! La estética y el procedimiento de instalación pueden variar según sus intenciones y determinación.
- El presupuesto. Anote todos los accesorios y herramientas que necesitará por metro lineal y multiplíquelos por la longitud de su cerca para calcular el presupuesto real.
- Estético. Un factor relativo, que debe ajustarse a los requisitos legales, presupuesto, material y condiciones de instalación.
Tipos de vallado: de la alambrada al laminado
Alambrada flexible
El cable flexible es ideal para terrenos accidentados o altos. También es la solución más rápida y económica de instalar.
La malla es generalmente estrecha (50 x 50 mm, 100 x 50 mm…), lo que impide que los animales accedan al terreno.
La cerca se puede cubrir con una malla de alambre (para evitar miradas indiscretas) o con vegetación (setos o arbustos).
Los postes de metal o madera (exóticos o acacia) clavados en el suelo sirven como soporte para la cerca, lo que la hace relativamente fácil de instalar.
La cerca está sostenida por cuerdas de alambre (sostenidas por tensores) y grapas o grapas. Sin embargo, el alambre flexible es fácil de cortar (intrusiones), no es muy resistente y su apariencia es básica.
Alambrada rígida en paneles
El eslabón de la cadena del panel rígido es el extremo superior del eslabón de la cadena. Tiene una mejor presencia que el cable blando y también se adapta muy bien a terrenos inclinados, ligeramente irregulares con curvas o contornos sinuosos.
La instalación de los postes requiere precisión y minuciosidad, ya sean clavados directamente en el suelo o fijados a una pared, para obtener una perfecta alineación de los paneles.
Es más rígido y resistente que el alambre flexible, pero no más opaco, por lo que se puede complementar con un seto para evitar la vista desde el exterior. Como cualquier cerca, evita la entrada de animales, pero es relativamente fácil de cortar (intrusiones). Aunque la instalación de los postes es más compleja que para un cable flexible, esta solución ofrece una buena relación calidad / precio.
En los últimos años se han comercializado paneles y postes de diferentes colores.
Enrejado
El enrejado está compuesto exclusivamente de metal; Esta es la parte superior de la gama de casos. Debe ser instalado por un especialista, quien le ofrecerá diferentes formas y colores. Este tipo de vallado, que se coloca directamente en el suelo o en una pared, realza su propiedad y le garantiza una larga vida útil. No requiere mucho mantenimiento (los soportes y las barras se tratan contra la oxidación, una capa de pintura cada 10 años aproximadamente) y su resistencia es infalible. Por otro lado, su precio es bastante elevado.
Vallado tradicional
La valla tradicional es un activo innegable en la estética de su propiedad. Es un altavoz potente, disponible en diferentes formas y colores. Esta valla, de madera, PVC o composite, es un verdadero valor añadido para su hogar. Se instala directamente en el suelo o en una pared, aunque el proceso es un poco más complicado que el de una simple malla de alambre.
Si es de madera, requiere un mantenimiento periódico (barniz o pintura), a diferencia de los de PVC o composite. Está disponible con largueros verticales u horizontales, por lo que sin duda encontrarás un modelo y color de valla que se adapte a tu hogar, ya sea tradicional o moderno. Esta valla consistente resiste el viento y, dependiendo de su altura, evita intrusiones (especialmente cuando se coloca en una pared). Sin embargo, su instalación es cuidada y experimentada, y cuesta más que una malla de alambre.
Laminado o panel de ocultación
El panel de ocultación o laminado suele ser de madera, pero también está disponible en composite. Los paneles de ocultación están destinados principalmente a separar espacios y brindar privacidad.
Laminado, con una estética cuidada que realza el terreno, protege bien de los animales y el viento. Su instalación es relativamente sencilla, con postes clavados en el suelo o en una pared.
Dependiendo de la altura elegida se evitan intrusiones. Sin embargo, esta solución es bastante frágil y, en el caso de los modelos de madera, requiere un mantenimiento regular (lacado, barnizado). Solo apto para pequeñas parcelas o tramos cortos. El panel opaco se utiliza a menudo para delimitar una terraza o una piscina.