El mejor truco para crear y recordar contraseñas
Se nos ha dicho mil veces —y todos deberíamos saber ya— cómo deberían ser las contraseñas que usamos todos los días en multitud de páginas y servicios web para garantizar la seguridad y evitar que nos puedan suplantar o incluso secuestrar la información.
¿Cómo crear y recordar contraseñas?
Sabemos que las contraseñas, para ser buenas y seguras, deben tener más de 8 caracteres (mejor 12), que haya letras minúsculas y mayúsculas, que incluyan números, que contengan caracteres especiales, etc… Además, es muy importante que la contraseña no sea una palabra “de diccionario” o que signifique algo.
Se estima que una contraseña de 8 caracteres bien hecha se puede hackear en cuestión de horas, y si solamente tiene letras o números, en cuestión de minutos o segundos. Si la contraseña tiene 12 caracteres, mayúsculas, minúsculas, números y símbolos, necesitaría 34000 años para ser hackeada. Vale la pena esforzarse.
Todo esto lo sabemos perfectamente, sin embargo, en la práctica, nos encontramos con que utilizamos nombres de nuestras mascotas, nuestros hijos, fechas de cumpleaños, fecha de la boda o contraseñas fáciles como “123456” o “qwerty” o “contraseña”. Y lo que es peor, reutilizamos las mismas contraseñas en diferentes servicios, y usamos la misma para inscribirnos a un sorteo, para la cuenta de Google y para el banco online… Si alguien la descubre, ten por seguro que la va a probar en todos los servicios y… ¿hasta dónde podría acceder?
Está demostrado que esto de las contraseñas, en general, lo llevamos fatal… El problema es que una buena y robusta contraseña, como podrían ser c10CpB,VeP@tV o ¡SJe$1ab&me! son muy difíciles de recordar. ¿O no?son muy difíciles de recordar. ¿O no?
La verdad es que hay un truco muy fácil para crear y recordar contraseñas largas y complejas. Este truco consiste en usar reglas mnemotécnicas. La mnemotecnia es un conjunto de técnicas de memorización basada en la asociación mental de la información a memorizar con datos que sean parte de la memoria o de la práctica cotidiana.
Es decir, en lugar de recordar una contraseña compleja y sin sentido, ¿no sería más fácil recordar un concepto conocido o una frase fácilmente recordable?
Vamos a ver un ejemplo: ¿Te sabes el poema “La canción del pirata”, de Espronceda? Mucha gente se sabe lo de “con diez cañones por banda, viento en popa a toda vela”. Ahora coje las iniciales de las palabras de la frase, pon las de los nombres en mayúsculas, los numerales en números, e incluye algún símbolo… La frase ha quedado c10CpB,VeP@tV que es una contraseña fantástica.
Otro ejemplo, prueba con tus intereses. ¡Scarlett Johansson es una actriz buenísima y me encanta! → ¡SJe$1ab&me!
Ahora que tienes el truco, podemos agregar variaciones para tener una contraseña distinta para cada servicio. Por ejemplo, para entrar en Facebook podemos poner ¡SJe$1ab&me!FB o MZ¡SJe$1ab&me! (MZ por Mark Zuckerberg).
Usar contraseñas seguras y, en general, tener conceptos de ciberserguridad es una de las competencias digitales que exige la sociedad digital actual. Estas y otras habilidades digitales te las cuentan en el blog El Visitante Digital.