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El distintivo Cero emisiones de la DGT para vehículos eléctricos

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tukj

 

La elección de vehículos eléctricos en España va ganando en aceptación en los últimos años. Las cuotas de mercado del pasado 2021 así lo confirman, con un aumento de matriculaciones del 37,7 %. Entre los vehículos eléctricos, los más vendidos fueron los turismos 100 % eléctricos, con un incremento superior al 32 % respecto al año anterior. 

Son muchos los motivos para optar por un coche eléctrico a la hora de comprar un vehículo. Además de la razón principal de no producir emisiones, aportan otra serie de ventajas importantes a tener en cuenta, como el bajo coste de uso, la conducción suave, beneficios fiscales o aparcar gratis. Además, el problema que plantea la limitación de autonomía de estos vehículos es cada vez menor ya que la red de puntos de recarga ha crecido considerablemente en el territorio español, con más de 11.500 puntos de acceso público situados estratégicamente en carreteras, autovías y autopistas, incluyendo postes de recarga ultrarrápida de las áreas de descanso. También las compañías eléctricas están aumentando la oferta de servicios adicionales de instalación y mantenimiento de puntos de recarga doméstica, junto a tarifas de luz diseñadas para ajustar tanto la potencia eléctrica como el consumo que se necesita para la recarga durante las horas con el precio de la electricidad más barata. 

Al no producir emisiones de CO2 ni otros gases contaminantes a la atmósfera, los coches eléctricos reciben un tratamiento fiscal más favorable ya que están exentos del impuesto de matriculación, lo que supone de un ahorro de hasta el 14 % dependiendo del modelo, y reciben también grandes bonificaciones en el impuesto de circulación, según cada municipio, que alcanza en torno a un 75 % de reducción en las grandes capitales como Barcelona y Madrid. Estos beneficios fiscales se deben a que los coches eléctricos se encuentran entre los vehículos que reciben la etiqueta Cero de la Dirección General de Tráfico.

¿Qué es la Etiqueta Cero de la DGT y cómo se obtiene?

La etiqueta Cero es un distintivo ambiental oficial para vehículos no contaminantes que otorga la Dirección General de Tráfico y que comprende cuatro categorías distintas: distintivo cero emisiones (etiqueta azul), distintivo Eco (etiqueta verde y azul), distintivo ambiental B (etiqueta amarilla) y distintivo ambiental C (color verde). 

Esta clasificación responde al potencial de emisiones de cada tipo de vehículo y la máxima distinción, que es el distintivo cero emisiones, sólo se concede a vehículos eléctricos, tanto con batería (BEV), como con autonomía extendida (REEV) y vehículos eléctricos híbridos enchufables con autonomía inferior a 40 kilómetros (PHEV).

La etiqueta Cero es válida tanto para turismos, como para furgonetas y motocicletas que cumplan con las características y límites de emisiones marcados por la DGT. Este distintivo ambiental se obtiene en cualquier oficina de Correos por un coste de 5 € y debe solicitarlo el titular del vehículo o persona autorizada aportando el permiso de circulación y el documento de identidad del solicitante. La etiqueta con el distinto ambiental que corresponda, según el vehículo para el que se solicite, se recibe en pocos días y contiene un código QR con información esencial que incluye la marca del vehículo, modelo, año de matriculación, nivel de emisiones EURO, potencia eléctrica y nivel de autonomía. 

La etiqueta debe pegarse en la parte inferior del parabrisas a la derecha de forma que resulte fácilmente visible para agentes de tráfico y autoridades. En la actualidad este distintivo no es obligatorio pero sí muy recomendable para poder beneficiarse de sus ventajas, como la posibilidad de usar el vehículo en casos de circulación restringida por episodios de alta contaminación o para el aparcamiento en la vía pública sin tener que pagar. 

Aunque los coches eléctricos siguen teniendo un precio superior, lo cierto es que esas diferencias se están acortando y que las ventajas que llevan asociadas terminan por ser rentables a medio y largo plazo. Además de las rebajas fiscales anteriormente indicadas, la mecánica del vehículo eléctrico es más sencilla a diferencia de lo que pudiera pensarse, por lo que suelen averiarse menos y requieren un mantenimiento menor. 

En circulación, las ventajas económicas frente a otros tipos de vehículos son evidentes, tanto en impacto medioambiental como en el ahorro de consumo, porque frente a los seis euros de combustible de media por cada cien kilómetros, el gasto de un coche eléctrico no pasa de un euro medio para recorrer la misma distancia. Si estos costes se combinan adecuadamente con otros gastos imprescindibles, por ejemplo, aprovechando alguna de las promociones para contratar pólizas y seguros online, la compra del vehículo eléctrico habrá sido una inversión acertada y la forma ideal para circular a diario por entornos urbanos sin generar más polución.