Cómo realizar la instalación de un cargador eléctrico
La realidad es que el primer paso antes de lanzarse a la compra de un coche eléctrico es disponer de un punto de recarga vinculado al mismo, es decir, un lugar donde cargar el vehículo de forma habitual, ya sea en la propia vivienda o en un garaje.
Sobre todo si no quieres complicarte la vida más de la cuenta, lo normal es tener un punto de recarga a tu disposición, dónde el coche se cargará el 90% de las veces sin necesidad de depender de la infraestructura de recarga pública, que siempre estará disponible para ocasiones más puntuales.
Punto de recarga en una vivienda unifamiliar
La instalación de un cargador de coche eléctrico en una vivienda unifamiliar es la más sencilla y la que menos inversión requiere, pues esta ya contará con un enchufe convencional dónde, sin ningún tipo de instalación, se pueda cargar el vehículo.
Este tipo de carga realizada en un enchufe convencional con toma schuko, suele estar limitada a 10 A y a unos 2,3 kW de potencia para garantizar la seguridad de la instalación, lo que puede aumentar a su vez, los tiempos de carga.
No obstante, si queremos disponer de potencias de recargas superiores a 16 A o 3,68 kW será necesario añadir un punto de recarga de pared a la instalación, conocido como Wallbox, añadiendo un coste adicional aproximado de 500 € a la instalación
Además, se debe de instalar un circuito exclusivo desde el contador de la vivienda hasta la ubicación de punto de recarga para asegurarnos de que la instalación está bien dimensionada y que cuenta con todas las protecciones necesarias.
Punto de recarga en garaje comunitario
En el caso de llevar a cabo un punto de recarga en un garaje comunitario, el proceso no es tan sencillo, pues se deberá informar a la comunidad de vecinos, aunque no será necesario someterse a la aprobación de los mismos.
Existen dos tipos de configuración del punto de recarga:
- Si el garaje se encuentra en la misma comunidad que la vivienda, por ejemplo, en el sótano, la normativa permite tender un cable desde el contador de la vivienda hasta la plaza de garaje. De esta manera permite que el punto de suministro, y la factura, sea compartido por la vivienda y el cargador eléctrico
- Si el garaje es de una propiedad diferente, por ejemplo, de otra comunidad, se tendrá que solicitar un nuevo contador a la distribuidora, obligando a pagar otra factura eléctrica.
Complicaciones en la instalación de un cargador eléctrico
La mayor complicación y coste de la instalación de un cargador de coche eléctrico suele estar entre la distancia entre el contador y el punto de recarga pues, dependiendo de la cantidad de metros y de la dificultad del recorrido, el coste de la obra puede aumentar considerablemente.
Para combatirlo, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha iniciado los trámites para modificar el Código Técnico de Edificación, de manera que los edificios de nueva construcción o aquellos que han sido rehabilitados garanticen la preinstalación en el 100% de las placas de aparcamiento
Coste de la instalación de un cargador eléctrico y ayudas disponibles
El coste total de la instalación es muy variable, pues depende de diferentes factores como:
- La obra a llevar a cabo
- Los metros de cable necesarios
- De sí se instala un Wallbox o no, y del modelo que se elige.
Como referencia se suele hablar de un rango de 1.500 € con todo incluido, pero lo mejor es pedir un presupuesto a un instalador de cargadores eléctricos autorizado para hacernos una idea de nuestro caso concreto.
Por último, debes de saber que si te lanzas a la compra de un coche eléctrico nuevo y accedes a las ayudas del Plan Moves o el Plan Renove, el concesionario debe de ofrecer un descuento obligatorio en la factura de 1.000 € más IVA como subvención del punto de recarga.