¿Cómo elegir la mejor caldera?
En general, no pensamos en reemplazar la caldera de la misma manera que reemplazaríamos un televisor o una computadora. Es esencial, un elemento esencial de la comodidad y seguridad de nuestro hogar... pero generalmente solo lo recordamos cuando está causando problemas.
Si su caldera ha estado en uso por un tiempo, puede ser una unidad ineficiente. Si bien aún no ha comenzado a darte problemas, si la caldera ha estado en uso durante más de 15 años, puedes pensar en planificarla sin apresurarte a cambiarla y dejar de funcionar si falla repentinamente.
Para ayudarte a elegir una buena caldera, debes considerar diferentes aspectos: desde decidir la tecnología a instalar, hasta el costo y la eficiencia, y por supuesto el precio.
Para elegir entre diferentes calderas en Madrid sigue leyendo este artículo.
Tipos de calderas
Hay diferentes tipos de calderas dependiendo de cómo extraigas el humo.
- Calderas de presión atmosférica: Estas calderas toman el oxígeno del mismo local donde están instaladas, lo queman y lo liberan al exterior. Están prohibidos y no se pueden instalar desde 2010, aunque quien los posee puede mantenerlos.
- Calderas de tiro forzado: Funcionan igual que las calderas atmosféricas, pero incorporan un ventilador para la evacuación de los gases.
- Calderas estancas: En estas calderas la combustión se realiza en cámara estanca y es evacuada por un ventilador. Las calderas selladas son más seguras y eficientes.
- Calderas de bajo NOx: Son prácticamente iguales a las calderas estancas, pero consumen menos combustible y emiten menos humos contaminantes.
- Calderas de Condensación: En estas calderas, la tecnología de condensación obliga a los gases de combustión a condensarse, utilizando la energía del vapor de agua para convertirlo en calor.
El gas se quema a una temperatura más baja y consume más calor, ahorrando gas (hasta un 18%). Además, las pérdidas de gases de combustión a través del sistema de salida de gases de combustión se reducen considerablemente y se emiten gases de combustión bajos en NOx. Tienen la ventaja de ser seguras y muy eficientes, pero su desventaja es que requieren un drenaje cercano para drenar el condensado, por lo que también son más complicadas de instalar.
Para edificios nuevos, solo se pueden instalar calderas de condensación. En conclusión, las calderas de condensación son la mejor opción por su eficiencia y seguridad.
Caldera estanca o caldera de condensación: ¿cuál es mejor?
Las calderas estancas son una mejora respecto a otros tipos, pero si buscas una caldera eficiente y sostenible, las calderas de condensación son la mejor opción.
Su principal ventaja es una mayor eficiencia.
Las calderas de condensación a gas, si bien no son renovables, también son más respetuosas con el medio ambiente.
El coste anual de funcionamiento de las calderas de condensación es inferior al de las calderas herméticas porque son más eficientes: la diferencia no es grande, unos 30 euros al año, y la diferencia de precio entre un sistema y otro ronda los 300 euros.
La pregunta clave en el momento de la compra es si compensar la mayor eficiencia de las calderas justifica pagar más por ellas: la respuesta es sí... pero la recompensa no es inmediata.