Beneficios medioambientales de la energía solar
¿Es posible un futuro sin emisiones de CO2?
De entre las muchas preocupaciones que tenemos en la actualidad, el cambio climático es una de las más acuciantes. Aspectos como la estabilidad laboral, independizarnos, problemas imprevistos… Todos ellos parecen empequeñecer cuando pensamos en el futuro del planeta. El calentamiento global es un hecho, y más allá de eso, lo que debe preocuparnos es cómo pararlo, y lograr dejar a la próxima generación un planeta sano y verde. ¿Es posible realmente hacerlo? Sí, pero para ello debemos alcanzar que todos, entidades públicas y privadas, logren cumplir el objetivo de vivir y funcionar sin emisiones de CO2.
Un objetivo a no tan largo plazo
Las últimas cumbres acerca del cambio climático han ido estableciendo las fases y las directrices que debemos cumplir para salvar nuestro futuro. En estos objetivos se fijaban dos “deadlines”: la primera en 2030, con una reducción de, al menos, un 40% menos de emisiones de CO2, y una segunda y vital, en 2050, con el objetivo de 0 emisiones. Atrás quedan los tiempos en los que el problema podía posponerse porque parecía lejano. 2030 está a la vuelta de la esquina, y se necesitan resultados ya, si queremos evitar que los efectos del cambio climático sean irreversibles. Para lograr estos resultados, empresas y entidades deben mostrar que su compromiso con la sostenibilidad es real, y no solo palabras vacías.
¿Cómo lograr un día a día sin emisiones de CO2?
Nos hemos acostumbrado a utilizar combustibles fósiles para la maquinaria y para prácticamente todas las labores cotidianas del día a día. En algunos países, como en Francia, vemos que la energía nuclear, catalogada como energía limpia (si se genera y controla correctamente), es una de las principales fuentes energéticas. La realidad es que el futuro de la energía está en las renovables, y entre ellas, la energía solar, tanto térmica como fotovoltaica, tiene que ser la mayor apuesta de todos, ya sean agentes públicos, privados o particulares. Hace apenas unos días se produjo una situación que sirvió para dar eco a una circunstancia preocupante: la tecnología actual no está todavía preparada para almacenar energía solar en las cantidades masivas que serían necesarias para el funcionamiento de los equipos electrónicos.
Sin embargo, ¿es esto un motivo para no recurrir a la energía solar? Si la tecnología no ha llegado al punto de poder optimizar la recolección de electricidad a partir de luz y calor, lo que debe hacerse es seguir avanzando, seguir evolucionando en esta dirección, y ser capaces de innovar para aprovechar al máximo esta oportunidad. No hay más que ver el recorrido que han tenido las energías renovables, y comparar la situación actual con la de hace unos años. La normalización de la energía solar o eólica es la única manera realmente posible de alcanzar el objetivo: 0 emisiones.
Un caso de éxito
Cuando hablamos de que la tecnología actual no permite almacenar energía de manera masiva, nos referimos a que grandes bloques de pisos, mediante la exposición al sol durante unas horas, no serían capaces de guardar la electricidad suficiente para funcionar durante toda la noche, o que pudiéramos compensar los días grises y sin sol. No obstante, existen en la actualidad casos de verdadero éxito en el ámbito empresarial, que han realizado una transición energética total, logrando ser completamente autónomos, y sin emitir partículas de CO2 a la atmósfera.
Hablamos de Manual Color, empresa de impresión digital y que, además de su constante inversión en maquinaria e innovaciones para ofrecer un servicio de exquisita calidad, también destina grandes cantidades de su capital en sostenibilidad. Una marca que empezó en 2013 su camino verde con la creación del programa CleanCO2, y que este año marcó un verdadero hito en el mundo empresarial. Después de cambiar el papel fotográfico tradicional y el soporte Duratrans por su versión ecológica, después de reducir su consumo en un 40% y usar tintas ecológicas con certificado GreenGuard Gold, han demostrado que cuidar el planeta es posible desde ya mismo, con una auténtica revolución: la instalación de placas solares que proporciona a la marca toda la energía que necesita para sus labores de impresión.
Hablamos de una instalación capaz de abastecer a una superficie de 3.500 m2 funcionando a pleno rendimiento, con una energía completamente limpia. Los resultados hablan por sí solos, en el periodo de un solo mes, Manual Color dejó de emitir 4,4 toneladas de CO2 a la atmósfera, el equivalente a plantar 320 árboles. Casos como este nos dejan entrever un futuro en el que, realmente, quienes son capaces de ayudar a paliar los efectos del cambio climático y contribuir en salvar el planeta, den el paso definitivo para lograr el escenario sin emisiones de CO2 que todos deseamos.