La Energía perdida a diario en España
Según la UNESA, en España se calcula que se pierde un 8% de electricidad que se produce.
Pérdidas normales y no tan normales
Dentro de este 8% se encuentran factores que Red Eléctrica conoce, controla y que intenta reducir como son las pérdidas en el transporte y distribución. Otras son ilegales y las compañías distribuidoras y comercializadoras persiguen como ya hemos visto en algunos casos de nuestro Blog.
En el caso de las pérdidas por robo de energía, parece ser que el periodo de crisis que estamos pasando así como la subida incesante de electricidad, hacen que los usuarios busquen formas de pagar menos en la factura de la luz ya sea de forma legal (comparando tarifas) y de forma ilegal (quitando el ICP, trucando los contadores o conectándose directamente a la red sin ningún contador).
Pérdidas en el transporte de energía
Como hemos comentado, una parte de estas pérdidas se produce de forma “natural”, con esto queremos decir que se intentan evitar al máximo pero que siempre habrá unas mínimas pérdidas.
Para explicar esto, hay que saber que en la electricidad hay dos términos que son muy importantes, la tensión y la intensidad. Con estos dos parámetros podemos transportar la misma cantidad de energía de diferentes formas. Por ejemplo, transportar X energía a alta tensión y con poca intensidad y esta misma cantidad, si la queremos transportar a baja tensión, necesitaremos mucha intensidad.
¿Qué ocurre entonces? Las perdidas se generan principalmente debido a la intensidad, pero tampoco podemos llevar una línea de alta tensión hasta la puerta de nuestra casa (cableado mucho más grueso, ruido, peligrosidad…). Con lo que ambos extremos tienen sus pegas. Por este motivo es por el que se realizan las altas distancias a alta tensión (pocas perdidas) y la distribución hasta el consumidor final en baja tensión.
El robo de energía, ¿quién lo paga?
Podemos pensar que si conseguimos consumir electricidad de forma “gratuita” mediante un apaño o truco no va a pasar nada. Hemos visto casos en el que son pillados y multados por este hecho, pero además debemos saber que esa energía ha de pagarla alguien y que el dinero siempre sale del consumidor final. Es decir, si nuestro vecino roba energía, nosotros estaremos pagando indirectamente en nuestra tarifa la parte que no pagan.