"Aerotermia: la tecnología renovable clave en la lucha contra el cambio climático en la industria de la construcción"
La aerotermia es una tecnología de energía renovable que utiliza la energía del aire ambiente para calentar y enfriar edificios.
En el contexto del cambio climático, la aerotermia es una de las tecnologías más prometedoras para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en la industria de la construcción.
La calefacción y refrigeración de edificios representan una parte significativa de las emisiones de GEI en todo el mundo. En la Unión Europea, por ejemplo, la calefacción y refrigeración de edificios representan el 40% del consumo total de energía y el 36% de las emisiones de GEI. Por lo tanto, cualquier tecnología que pueda reducir el consumo de energía y las emisiones de GEI en este sector es muy valiosa para combatir el cambio climático.
La aerotermia funciona de la siguiente manera
Extrae el calor del aire exterior y lo utiliza para calentar un fluido refrigerante en un ciclo cerrado. El fluido refrigerante se expande y se evapora en un evaporador, absorbiendo el calor del aire exterior. Luego, el gas refrigerante se comprime y se condensa en un condensador, liberando el calor al interior del edificio. Este proceso se puede invertir para proporcionar refrigeración en verano.
La aerotermia ofrece varias ventajas en comparación con los sistemas de calefacción y refrigeración tradicionales.
En primer lugar, la aerotermia utiliza una fuente de energía renovable, el aire ambiente, lo que reduce las emisiones de GEI en comparación con los combustibles fósiles utilizados en los sistemas de calefacción y refrigeración convencionales. Además, la aerotermia no requiere la combustión de combustibles, lo que reduce el riesgo de incendios y emisiones peligrosas en el interior de los edificios.
Otra ventaja de la aerotermia es que es muy eficiente en términos energéticos. Según un estudio de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la aerotermia puede proporcionar calefacción y refrigeración con un 50% menos de energía en comparación con los sistemas de calefacción y refrigeración convencionales. Además, la aerotermia es muy flexible y se puede integrar fácilmente en los sistemas de calefacción y refrigeración existentes.
A pesar de estas ventajas, la aerotermia todavía enfrenta algunos desafíos en la adopción generalizada. Uno de los principales desafíos es el costo inicial de la instalación de sistemas de aerotermia, que puede ser más alto que los sistemas de calefacción y refrigeración convencionales. Sin embargo, los costos están disminuyendo a medida que la tecnología se vuelve más común y las economías de escala entran en juego.
Otro desafío para la adopción de la aerotermia es la necesidad de educar a los consumidores y profesionales sobre la tecnología. Muchas personas todavía no están familiarizadas con la aerotermia y pueden ser reacias a adoptarla. Además, la instalación y el mantenimiento de los sistemas de aerotermia requieren habilidades y conocimientos especializados que pueden no estar disponibles en todas las áreas.