Uso responsable y mantenimiento de los radiadores eléctricos en la vivienda

Los radiadores eléctricos consiguen calentar el aire cediendo calor al ambiente por convección. A medida que el aire caliente sube al techo de la habitación, el aire frío desciende y se calienta en un ciclo de convección. De esta manera, la habitación se calienta constantemente.

A diferencia de los calentadores de agua, que se calientan con una bomba de calor o una caldera, los calentadores eléctricos solo requieren una toma de corriente cercana. Cuando se conectan a la red eléctrica, comienzan a calentarse y, por lo general, tardan un poco en alcanzar la temperatura especificada. Pero tienen una operación muy eficiente cuando se trata de transmisión de energía. Además, no producen malos olores y no manchan las paredes.

La limpieza periódica de los radiadores es fundamental para el correcto funcionamiento del sistema de calefacción.Se recomienda limpiar los radiadores cuando no estén funcionando y por tanto fríos, para que el verano sea perfecto. El mantenimiento no es sólo superficial, el acceso a la zona donde se encuentran las tuberías no es fácil, por lo que se recomienda utilizar primero una aspiradora y luego una aspiradora de cepillo o cilíndrica que pueda llegar a todos los rincones.

¿Qué tipos de calentadores eléctricos hay?

En el mercado podemos encontrar diferentes tipos de calentadores eléctricos dependiendo de la tecnología utilizada. Algunos son más caros que otros, pero hay modelos para todos los bolsillos y con la comodidad de enchufarlos y disfrutar de la cómoda calefacción que ofrecen.

Radiadores eléctricos de bajo consumo

Los radiadores de bajo consumo, también conocidos como radiadores azules, funcionan de forma similar a los radiadores que utilizan aceite como fluido caloportador. Se caracterizan por una pantalla azul desde la que podemos programarlos. Son de metal y se suelen montar colgados en la pared. Contienen resistencias internas a través de las cuales fluye corriente eléctrica y aumenta la temperatura. Incluso después de apagarse, mantiene el calor sin consumir energía. Este tipo de radiadores son adecuados cuando necesitamos calor durante más de cinco horas.

Calentadores de líquidos eléctricos

Estos calentadores eléctricos contienen en su interior un fluido caloportador que calienta y permite que el calor generado se mantenga por más tiempo. Dentro de esta variedad encontramos modelos que se anclan a la pared y otros que se pueden rodar individualmente. Son muy estéticas y no ocupan mucho espacio, ya que se pueden mover sobre ruedas y colocarlas en el espacio que desees.

Radiadores eléctricos con tecnología seca

Estos modelos constan de una resistencia eléctrica interna y su envergadura suele ser de aluminio o mica. Se calientan muy rápido pero se enfrían con la misma rapidez, por lo que se recomiendan por unas pocas horas, no por largos períodos de tiempo. Hay modelos de cerámica o mármol que tienen mayor eficiencia. Estos materiales retienen el calor por más tiempo y se recomiendan para períodos de tiempo más prolongados.

Consejos para realizar un buen mantenimiento

Apaga la calefacción

Antes de comenzar a limpiar los calentadores eléctricos, es importante asegurarse de que estén apagados. La seguridad es primordial cuando se trata de la limpieza, porque todos sabemos que el agua y la electricidad no son buenos socios.

Calentadores de vacío eléctricos

Primero, intente aspirar la mayor cantidad de polvo posible dentro, alrededor y debajo del radiador. Pruebe todos los accesorios de su aspiradora para ver cuál funciona mejor, incluso si es capaz de succionar entre las aletas. Pero no se preocupe si no es así, hay maneras fáciles de solucionar este problema.

El método del palo o la regla

Por supuesto, puedes comprar cepillos especiales para limpiar radiadores, pero si no tienes uno, tendrás que improvisar.

Tome un trozo largo de madera, algo así como una medida o una regla, envuelva un trapo alrededor del extremo y asegurelo con cinta adhesiva. Tenga cuidado de no cubrir la tela con demasiada cinta o envolver demasiada tela alrededor de la guata, ya que esto puede hacer que sea demasiado gruesa para caber en las pequeñas hendiduras del radiador.

Coloque una toalla o un trapo debajo del calefactor eléctrico (para recoger el polvo o la suciedad que caigan y para mantener el piso limpio) y comience a deslizar la varilla hacia arriba y hacia abajo a lo largo del interior del calefactor, cepillando el polvo y la suciedad hacia afuera hasta que todo esté muy limpio.

Repita esta acción en cada elemento de su radiador hasta que haya eliminado la mayor parte (si no todo) del polvo y la suciedad.

El método de secado con secador

Lo creas o no, una forma sencilla y eficaz de eliminar el polvo del interior y detrás del radiador es utilizar un secador de pelo.

Simplemente apunte la boquilla de la secadora a las ranuras en la parte superior del calentador y enciéndalo a máxima potencia.

Esto elimina una gran cantidad de polvo y suciedad del interior y la parte posterior del producto. Asegúrate de poner un paño o una toalla adecuada en el suelo antes de empezar.

Limpiar con agua y jabón

Vierte líquido para lavar platos o su detergente favorito (pH neutro) en un cubo de agua.

Recuerde verificar primero si su radiador está apagado. Sumerja una esponja o un paño en el agua y escúrralo para que quede ligeramente húmedo. Limpie el exterior, con cuidado de no salpicar el piso, limpie con un paño seco.

Consejos adicionales

También hemos preparado algunos consejos adicionales para mantener limpio su sistema de calefacción:

Aspire su calentador eléctrico regularmente. Esto no solo lo protege de las alergias, sino que también ayuda a garantizar que su sistema de calefacción funcione perfectamente en todo momento.

Recuerda que el verano es la mejor estación para una limpieza profunda.Si desea limpiar a fondo su radiador, puede quitarlo completamente de la pared para limpiar o incluso pintar la parte posterior y la pared de atrás.

Cosas a considerar al limpiar un calentador eléctrico

Limpiar sus calentadores eléctricos es bastante fácil una vez que aprende a hacerlo, pero hay algunas cosas que debe tener en cuenta al hacer el trabajo.

Es importante prestar atención al tipo de materiales que utilizamos. Evite el uso de materiales abrasivos, como estropajos metálicos, ya que pueden rayar y dañar la superficie. Para las manchas difíciles, rocíe con oxígeno activo, deje actuar unos minutos y luego limpie enérgicamente con un paño o una esponja.

Nunca intente abrir su calentador eléctrico para limpiarlo ya que podría dañar partes del mismo.